Los accidentes son eso, accidentes, nadie puede impedirlos. Pero SÍ podemos provocarlos...
¿Cómo? pues no teniendo el coche en buen estado mecánico. El mantenimiento que requiere un coche no se limita a repostar gasolina y cambiar de vez en cuando el aceite y filtros, hay otras tareas cruciales para la seguridad vial y que a veces se pasan por alto.
La primera es hinchar bien los neumáticos. Unos neumaticos mal hinchados o desgastados aumentan colosalmente la probabilidad de salirnos de la vía, o perder el control del coche provocando un accidente grave. Muchos conductores se arriesgan con neumáticos a sólo 1 BAR de presión, envez de controlar la presión de los mismos. Veámos un vídeo donde se explica los efectos de conducir con neumáticos en mal estado:
También mencionar que unos neumáticos desinchados aumentan apreciablemente el consumo del coche, y nos arriesgamos a que estos se recalienten demasiado en viajes, y revienten, por lo que deberíamos siempre revisar la presión de los mismos todos los meses, y aplicar la presión recomendada por el fabricante, sin pasarnos nunca de la presión máxima que nos indique el neumático en el lateral.
¿Y que pasa con los amortiguadores? pues se recomienda revisarlos cada 20.000Km, de lo contrario dejan de cumplir su función, por lo que podemos llegar a perder el control del vehículo. Incluso dejan de funcionar correctamente ayudas como el ESP. Veamos tres videos, el primero con amortiguadores nuevos, y los otros dos con amortiguadores utilizados (65.000Km y 95.000Km respectivamente):
Evitemos por tanto conducir en un coche en mal estado, y revisemos la mecánica del mismo para poder asi evitar accidentes que pueden costarle la vida a nuestros seres más queridos y a nosotros mismos.
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