domingo, 1 de marzo de 2009
Siguiendo el ejemplo...
Mateo 19:23,24 "Mas Jesús dijo a sus discípulos: "En verdad les digo que será cosa difícil el que un rico entre en el reino de los cielos. Otra vez les digo: Más fácil es que un camello (o soga) pase por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el reino de Dios".
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Pero tambien hay que recordar que Jesús tambien dijo "Bienaventurados los pobres de espiritu...","donde esta tu riqueza ahi esta tu corazón", lo digo porque Jesús tambien tuvo discipulos ricos, la diferencia era que su corazón era pobre pero dueño de una sola riqueza, Dios, y su riqueza material, la usaban para ayudar a sus hermanos, como dice claramente acerca de los primeros cristianos, "que todo sirva para la edificacion mutua", y si tenemos bienes materiales hay que administrarlos para el bien, Dios no nos pide que se viva en la miseria sino en igualdad. Obviamente Jesús tambien pide la pobreza material, pero es un llamado especial para que la unica riqueza sea solo Dios.
ResponderEliminarLa expresión "Bienaventurados los pobres de espíritu" recogida en Mateo 5:3 también puede traducirse por "Felices son los que tienen conciencia de su necesidad espiritual" y continúa diciendo " puesto que a ellos pertenece el reino de los cielos." En este texto Jesús claramente estaba indicando la necesidad de enriquecerse espiritualmente, de ser consciente de la necesidad que tenemos de buscar a Dios. No se habla de las riquezas materiales.
ResponderEliminarLa expresión "donde esta tu riqueza ahi esta tu corazón" recogida en Mateo 6:19-21 se entiende mejor si se lee el contexto: ”Dejen de acumular para sí tesoros sobre la tierra, donde la polilla y el moho consumen, y donde ladrones entran por fuerza y hurtan. Más bien, acumulen para sí tesoros en el cielo, donde ni polilla ni moho consumen, y donde ladrones no entran por fuerza y hurtan. Porque donde está tu tesoro, allí también estará tu corazón." Por lo tanto en el texto se nos anima a enriquecernos espiritualmente, no materialmente, ya que si nuestro tesoro es material podemos perderlo en cualquier momento, a más tardar al morir, pero los tesoros espirituales son eternos, ni siquiera la muerte nos puede separar de ellos, ya que Dios promete devolverle la vida a las personas que han muerto en la resurrección tal y cómo se menciona en Juan 5:28,29 "No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán, los que hicieron cosas buenas a una resurrección de vida, los que practicaron cosas viles a una resurrección de juicio"
Jesús se sintió impulsado a hablar de las riquezas ante la reacción que tuvo un joven gobernante rico cuando él le dijo: “Vende todas las cosas que tienes y distribuye entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sé mi seguidor”. (Lu 18:22, 23.) Aquel joven tenía la obligación de ayudar a sus compañeros israelitas necesitados. (Pr 14:21; 28:27; Isa 58:6, 7; Eze 18:7-9.) Pero el que no estuviese dispuesto a desprenderse de los bienes materiales para ayudar a otros y hacerse seguidor de Jesucristo le impidió entrar en el reino de los cielos. Naturalmente, lo que Jesús dijo al joven gobernante rico no significa que un cristiano no pueda tener riquezas materiales. Por ejemplo, en el siglo I E.C. había cristianos ricos en la congregación de Éfeso. El apóstol Pablo no le dijo a Timoteo que aconsejara específicamente a estos hermanos ricos que se despojaran de toda posesión material, sino que escribió: “A los que son ricos en el presente sistema de cosas da órdenes de que no sean altaneros, y de que cifren su esperanza, no en las riquezas inseguras, sino en Dios, que nos proporciona todas las cosas ricamente para que disfrutemos de ellas; que trabajen en lo bueno, que sean ricos en obras excelentes, que sean liberales, listos para compartir, atesorando para sí con seguridad un fundamento excelente para el futuro, para que logren asirse firmemente de la vida que realmente lo es”. (1Ti 6:17-19.) De modo que lo que estos cristianos ricos tenían que hacer era vigilar su actitud: mantener las riquezas en su debido lugar y utilizarlas de manera generosa para ayudar a otros.
Un ejemplo de un rico que se hizo discípulo de Jesús fué Zaqueo, principal recaudador de impuestos de Jericó. La zona de Jericó, fértil y productiva, proporcionaba considerables impuestos debido a su comercio, y Zaqueo, como muchos otros recaudadores de impuestos, probablemente se valió de prácticas dudosas para procurarse parte de su notable riqueza, pues el registro dice que “era rico”. Cuando en la primavera de 33 E.C. Jesús llegó a Jericó, antes de ir a Jerusalén a enfrentarse a la muerte, Zaqueo buscó la manera de verle, pero como era de baja estatura, no podía ver por encima de la muchedumbre. Así que se adelantó corriendo y se subió a un árbol. Este interés impresionó de tal modo a Jesús, que le dijo a Zaqueo que se alojaría en su casa mientras estuviese en Jericó. No obstante, los habitantes de la ciudad objetaron, diciendo que Jesús se hacía amigo de los pecadores. Zaqueo mostró un cambio en su actitud, pues dijo que devolvería el cuádruple de lo que había obtenido injustamente y daría la mitad de sus bienes a los pobres. Jesús reconoció que entonces su casa estaba en vías de salvación. (Lu 19:3-10.)
ResponderEliminarComo podemos ver claramente, se puede ser rico y discípulo de cristo al mismo tiempo, pero si se almacenan estas riquezas para uno y no se comparten con los hermanos necesitados no esta siendo rico para con Dios. Por eso es dificil que existan verdaderos discípulos de Cristo que sean muy ricos, porque en primer lugar pocas veces se pueden obtener grandes riquezas materiales de una forma justa, con el trabajo duro, y en segundo lugar no se puede ser cristiano y al mismo tiempo no ceder una parte importante de esas riquezas a los pobres y necesitados. El ejemplo de Zaqueo ilustra cómo estuvo dispuesto a darle a los pobres la mitad de sus bienes y a devolver lo que robó u obtuvo injustamente.